Elegir el nombre para tu curso online es relevante dentro del proceso de creación. Forma parte de los pasos esenciales, ya que se trata de reflejar la identidad y objetivo de tu formación en pocas palabras. Es lo primero que verán los clientes potenciales y que puede definir si toman la decisión de querer saber más de tu producto formativo o no.
Si estás en la fase de planificación de tu próximo curso, ten en cuenta las recomendaciones que te daremos. Un buen nombre te acerca más a tus posibles estudiantes, causa impacto y genera interés.
El nombre correcto te hará resaltar del resto y aumentará la probabilidad de que más usuarios hagan clic. Las palabras tienen el poder de comunicar un concepto y lograr que los clientes potenciales se involucren con tu curso, no dejes pasar esta oportunidad. Enfocarte en titular tu capacitación online de forma adecuada, es un esfuerzo que vale la pena.
¿Por qué es importante elegir el nombre correcto para nuestro curso online?
Cuando se trata de vender un curso online, la primera impresión que causes es determinante. Por lo tanto, no te puedes descuidar al elegir un nombre y tomarlo a la ligera, no puede ser cualquiera. Debes ubicar algo que defina realmente el concepto de lo que es tu curso online.
Al navegar por redes sociales o sitios web, podemos observar muchos títulos, publicidad y contenido. A pesar de esto, la mayor parte de todo ese contenido que visualizamos al desplazarnos, lo pasamos desapercibido. Solo muy pocas cosas con que nos topamos, llaman nuestra atención. Ya sea por tener un buen título, imágenes llamativas o al comunicar algo que nos atrae. Allí radica la importancia de destacarnos de la multitud.
Si elegimos nombres apropiados para nuestros cursos, estamos garantizando que las miradas y clics sean para nuestro negocio. Aumentaremos nuestras ventas, tendremos un mayor tráfico en la web y captamos a una audiencia más específica.
Esto debes hacer para crear un gran título para tu curso en línea
Elegir el nombre de tu curso no tiene porque ser una lucha que te genere estrés o dudas. Solo debes poner a prueba estas recomendaciones que te indicaremos, y tendrás una idea más centrada de los elementos que debe contener el nombre de tu curso.
Especificar los resultados que obtendrán con tu curso
Para crear un nombre de curso que convierta realmente, debes nombrarlo de una forma que pueda transmitir de qué se trata, los beneficios que otorgará y qué resultados obtendrás los estudiantes.
Los resultados que aspiramos ofrecer deben ser razonables y que correspondan al contenido que el curso contiene. Al hacer promesas que no cumplirás, los clientes en algún momento se darán cuenta y manifestarán su descontento. Este tipo de situaciones se deben evitar a toda costa. Asimismo, solo debemos hacer promesas de cosas que podamos cumplir. Por lo tanto, lo que prometas, específicalo en el nombre del curso.
Antes de crear cualquier contenido de la capacitación online, debemos de tener ya establecido el nombre del curso. Tendremos buenos resultados, siempre que nos alineemos a las necesidades de los clientes y esto se expresa en la forma en la que nombramos el curso.
Abordar a un nicho en específico
Para asegurar tener contacto con la audiencia adecuada, debemos reducir los nichos a los que direccionamos nuestro título del curso. Si utilizamos un nombre para nuestro curso, que se dirija exclusivamente a un grupo específico de personas, estamos asegurando captar su atención.
Esto marca una clara ventaja por encima de su competencia que usan nombres que invocan a una audiencia más amplia. Entre más detallado sea nuestro título, más claro estará el objetivo que los estudiantes lograrán con este curso. De igual manera, esos prospectos que están en búsqueda de algo determinado, se verán tentados por tu propuesta.
Asegúrate siempre de dirigirte a tu audiencia ideal en el nombre del curso. Nuestro objetivo es que el cliente se sienta identificado con lo que ofrecemos y dé el siguiente paso.
Usar un lenguaje sencillo
Algunos creadores de curso cometen el error de utilizar palabras o términos complejos para describir su producto formativo. Esto solo es permitido, si la audiencia a la que va dirigido este material maneja ese tipo de jerga, en caso contrario, estás haciendo todo mal.
Trata de mantenerlo y directo. Ssimple i el nombre de tu curso es difícil de entender, estarás perdiendo ese instante de conexión con tus prospectos. Esa primera impresión que se llevarán no será la más idónea.
Evitar los nombres largos
Los cursos con nombres largos, está demostrado que tienen una tasa muy baja de clics y de tráfico. La cantidad de palabras que tenga el nombre de un curso, dependerá también de su tipo de audiendia, contenido y mercado. Sin embargo, hay que considerar que entre 7 y 12 palabras, es la medida promedio recomendable para garantizar la atención de los prospectos.
Debemos enfocarnos en comunicar efectivamente de qué se trata el curso y sus beneficios, todo dentro de un título con la cantidad de palabras que se recomiendan. Piensa que otros detalles se pueden dar en los subtítulos o descripción del curso. El nombre de tu curso debe ser una síntesis corta de lo que obtendrán los estudiantes, no exageres.
El nombre de tu curso online es el punto de partida
Así tengas un contenido y recursos increíbles que brindar una experiencia de aprendizaje exitosa. Si no identificas a tu curso con un nombre correcto, no estarás llegando a ese público objetivo que te necesita.
Valora el poder que tiene el título de tu curso de principio a fin. No pases por alto que cómo llames a tu curso, es la mejor forma de comunicar de qué se trata. Con un nombre cualquiera, no estarás obteniendo los resultados satisfactorios que esperabas.
