Los alumnos agotados son una preocupación para los formadores. Las métricas son la mejor forma de hacer seguimiento al comportamiento y rendimiento de tus estudiantes. Saber cuáles son las señales que te darán indicios de que no solo están aburridos, si no que están agotados, desanimados o frustrados; te ayudará a atender oportunamente sus necesidades.
Aunque si los estudiantes se sienten agotados puede ser por varios factores y algunos puedan estar lejos del alcance de los formadores, es importante identificarlo a tiempo. Como educadores nuestro objetivo va más allá de vender cursos online, debemos estar atentos al desenvolvimiento de los usuarios con nuestros programas.
¿Cómo afecta la fatiga de aprendizaje a tus alumnos?
La fatiga de aprendizaje se refiere a esa condición que ocurre cuando una persona se siente sobrecargada. Entre los principales síntomas está mostrarse estresado o abrumado por las clases y las responsabilidades que esto conlleva. Asimismo, todo esto hace que las personas sientan una mayor ansiedad o cansancio, y no le permite concentrarse.
Hay que animar a los estudiantes a establecer límites saludables entre sus labores diarias y el aprendizaje online. Si los participantes se sienten agotados, puede representar un desafío para el aprendizaje y el desarrollo de sus habilidades.
Indicadores de que tus alumnos están agotados
Si te preocupa que tus alumnos estén agotados y que no puedan disfrutar de la experiencia de aprendizaje en pleno, es momento de que conozcan estas señales de advertencia. Alivia esta carga y ayudalos de forma oportuna para evitar que abandonen la formación online.
Su progreso se ralentiza o no entran al curso con frecuencia
Al empezar una nueva capacitación los estudiantes están entusiasmados, por lo que aprenderán y lo que esto representa para su desarrollo de habilidades y adquisición de nuevo conocimiento. Sin embargo, a medida que avanza el tiempo, es posible que las lecciones se vuelvan más complicadas o exigentes.
Perder el interés en continuar avanzando con las lecciones o ya no entrar con tanta frecuencia al curso, es un indicador de que tus estudiantes pueden estar agotados. Combate esto, manteniendo una comunicación constante con ellos, ofréceles ayuda personalizada ante las dudas, envíales mensajes al correo electrónico motivándolos a continuar.
Han perdido el compromiso
Es común que los estudiantes atraviesen momentos donde sus niveles de compromiso no son los más altos. Se puede deber a preocupaciones en su vida laboral o personal. Asimismo, cuando pasan de ser los más destacados en clases a estar poco activos, puede ser signo de agotamiento.
Un estudiante que ya no participa, puede o estar ocupado o simplemente no tiene nada que aportar en este tema. En estos casos, debemos mostrarles a los participantes que hemos apreciado su alto nivel de intervención en el pasado y que extrañamos su presencia en clases. De esta manera lo motivaras, lo harás sentir parte de la formación y volverá a estar comprometido.
Tienen dificultades con el contenido
Si notas que un alumno falla continuamente en las evaluaciones u obtienen calificaciones bajas en comparación a los resultados que había tenido regularmente, es posible que necesite ayuda.
Al bajar el rendimiento, puedes manejar esta situación comunicándote con ellos. También es de utilidad monitorear en qué está fallando y poner a su disposición otro tipo de material, como lo son, ebooks, lead magnets, pruebas con gamificación, entre otros. No todos procesan de igual forma el contenido suministrado en clase, y al estar agotados, se le hace más complicado comprenderlo.
Se vuelven irritables o negativos en las interacciones
La actitud negativa o irritabilidad de los alumnos, pueden ser algo más que el resultado de un mal día, esto es señal de que están agotados. Si este estrés es generado por el curso, quizás lo expresen en las discusiones o comentarios durante la clase.
Es clave abordar este tipo de circunstancia lo más rápido posible, para que no afecten la experiencia del aprendizaje del resto. Concéntrate en hablar directamente con el alumno y busca una solución ante su dificultad.
Ayudar a los estudiantes agotados puede ayudar a mejorar su experiencia de aprendizaje
Lo más importante sobre el agotamiento de tus estudiantes, es notarlo lo más pronto posible. De esta manera, podrás abordarlo e ir aligerando su carga e impacto en el resto del curso. Detectarlo en las primeras etapas, te permitirá corregirlo y el participante continuará con su formación.
En caso de no atender esto a tiempo, se saldrá de control y los alumnos abandonarán la capacitación, dejando malos comentarios de la misma. Debes estar atento a las señales, fíjate en las métricas, en el lenguaje de tus participantes y apóyalos en lo que sea necesario.